EL LAUREL Y LA BRUJERÍA
EL LAUREL Y LA BRUJERÍA
Si hierves hojas de laurel con tomillo, conseguirás un preparado ultra potente para limpiar maleficios y malas intenciones.
Si formas una cruz con hojas de laurel, escribes en cada una de ellas un deseo, y sobre ellas enciendes una vela con clavos de olor incrustados, esos deseos se cumplirán uno a uno; sin falta.
Si metes un atadillo de hojas de laurel y romero en tu maleta cuando salgas de viaje, estarás protegido ante cualquier percance o robo.
Si pones unas hojitas trituradas de laurel seco en las esquinas de tu hogar, evitarás que los seres del bajo astral se adhieran a las paredes.
Si haces un ritual con tu persona amada, en el que cada uno escribe el nombre del otro en una hoja de laurel y la lanzan a un lugar con agua, esa relación será feliz y vivirá momentos inolvidables hasta el fin de sus días.
Si envuelves un billete con una hoja de laurel fresca, dejas que se seque, y luego entierras la hoja (sin el billete) en una maceta, tu hogar siempre será próspero y sin ningún tipo de carencia.
Si en Luna menguante quemas unas hojas de laurel seco y esparces su humo por todas las estancias de tu casa, limpiarás las malas energías que se hayan podido estancar en tu hogar.
Si en Luna creciente, quemas unas hojas de laurel seco, atraerás todo lo bueno a tu hogar.
Si haces una corona con ramas y hojas de laurel fresco, y la cuelgas en la puerta de tu negocio, los clientes nunca faltarán y el éxito estará garantizado.
Si metes unas hojas de hierbabuena y laurel en un saquito, y lo llevas contigo cuándo vayas a firmar algún contrato (una nueva casa, un nuevo trabajo), ten por seguro que todo irá perfectamente y ambas partes saldrán beneficiadas.