DIENTE DE LEÓN – Taraxacum officinale
Esta simpática planta es extremadamente beneficiosa para purificar la sangre y mejorar nuestra piel. Aunque toda la planta es medicinal, mi recomendación es que utilices las raíces pues concentran gran cantidad de principios activos. Extraer la raíz es sencillo, verás que hasta las plantas más pequeñas tienen raíces de gran tamaño. La limpiamos muy bien cepillándola bajo un chorro de agua, si queda un poco de tierra no hay que preocuparse. Podemos utilizar la raíz directamente recolectada sin secar y también podemos dejarla deshidratando para utilizarla posteriromente. Cortamos en rodajas y hervimos 30 gramos en 1 litro de agua durante 10 minutos. Apagamos el fuego, dejamos reposar, colamos y bebemos. Podemos almacenarla hasta 3 días en la heladera para ir tomándola. Es segura para embarazadas y apta para encarar tratamientos largos, bebiendo los preparados por largas semanas.
